Jaime Lorente, Denver en La casa de papel, cambia la metralleta por la espada con el estreno hoy de El Cid, la nueva serie de Amazon Prime Video en la que el actor recrea a uno de los grandes héroes de la historia de España, Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador. Acción, conspiraciones palaciegas, traiciones, amores y combates son los ingredientes principales de esta superproducción que muestra cómo se forjó el mito partiendo de su época de humilde escudero, cuando era tan solo el joven Ruy, en una especie de Juego de tronos a la española y con base histórica.

“Se trataba de explicar al ser humano que hay detrás de la leyenda”, explica el protagonista, que reconoce que interpretar a este personaje “es un arma de doble filo”, así que ha preferido no coger ningún referente, ni siquiera la película de 1961 con Charlton Heston. “Yo no sé cómo era este hombre, nadie lo sabe. Yo he intentado rellenar de humanidad y de emoción a una figura que ha sido muy manipulada y prostituida por muchos intereses políticos”, recalca Lorente, que tuvo que aprender a montar a caballo y enfrentarse a un duro entrenamiento para abordar las peleas con espada ataviado con un vestuario acorde al siglo XI que pesaba más de 20 kilos.

Realidad y ficción se combinan en los cinco episodios de esta primera temporada. “Hemos respetado lo que pasó contándolo de manera entretenida”, dice José Velasco, uno de los productores ejecutivos y cocreador junto a Luis Arranz, que recuerda: “Fue un personaje importante en su época del que hay referencias históricas, pero quien lo convirtió en un mito que ha durado durante los siglos posteriores fue el poema de Mío Cid”, que tiene mucho de leyenda, ya que se utilizó para reavivar las cruzadas. “No nos hemos inventado tantas cosas, aparte de las emociones y ponerle el ritmo narrativo. Aparecen anécdotas muy reales”, asegura.

Alrededor del Cid, la serie plantea las intrigas políticas por la conquista del poder que se tejen en la corte, en Burgos, del rey Fernando I El Grande (José Luis García-Pérez) y su esposa, la reina Sancha la Bella (Elia Galera). “Ha sido un placer dar voz a esas mujeres a los que quienes han contado la historia han silenciado”, afirma la actriz.

Uno de los mejores ejemplos de esas féminas empoderadas está en doña Urraca, la primogénita de Fernando I, que sueña con el trono en detrimento de su hermano Sancho (Francisco Ortiz), el heredero por ser varón. “Fue una adelantada a su tiempo”, subraya Alicia Sanz, la actriz que la interpreta. Sus aspiraciones hacen que la relación con su padre, el rey, sea de lo más tensa: “Fernando es un padre amante de sus hijos pero con las ideas claras de lo que puede y no que no puede ocurrir. Y lo que quiere Urraca no es posible”, asegura José Luis García Pérez. También aparece Jimena (Lucía Guerrero), la joven que acabaría convirtiéndose en la esposa del Cid y que al inicio de la serie está prometida con su rival (Pablo Álvarez), el hijo del conde de León.