Miguel Ríos acudió en la noche de ayer a 'La Resistencia', el programa de Movistar presentado por David Broncano. El cantante de rock repasó su vida artística y algunos de los eventos que marcaron una trayectoria que lo convirtió en uno de los músicos más importantes del panorama nacional.
Como no podía ser de otra forma, la entrevista dejó titulares importantes. Uno que acaparó los focos fue el partido de bádminton que el presentador le propuso al cantante: "¿Por qué no jugamos a algo? ¿Un bádminton? Y retamos a otra pareja de presentador y cantante".
Miguel Ríos no pareció muy convencido con la propuesta, aunque sí le hizo reir. "Uno que tenga 120 años, que yo estoy ya muy mayor para el deporte", contestó con gracia el músico. "Tú y yo contra Roberto Leal y Raphael", le propuso más específicamente Broncano.
Al cantante le pareció una difícil propuesta, pues no creía que Raphael fuese a aceptar. "Yo a Raphael lo conozco muy bien y no creo que vaya a aceptar. No creo que sepa lo que es el bádminton. Algo que sea fuera de él, no sabe que existe", bromeó Miguel Ríos. "Miguel Ríos tirando beef a Raphael, esto no lo hemos visto venir", concluía Broncano.
"Toda la vida reprimido, me cago..."
Por si fueran pocos charcos, Miguel Ríos decidió luego pasar a la política y hablar sobre la famosa frase "todos los políticos son iguales". "No es así. Hay uno muy malo y otro que, bueno, no es tan malo. La gente de izquierdas tenemos una autocrítica tan grande que nos quedamos totalmente paralizados y dejamos que ganen los otros. No vamos a votar. Por ello, como estamos en campaña, me gustaría que ganasen los míos", confesaba ante la atenta mirada de Broncano.
Consciente de lo que acababa de decir, Miguel Ríos quiso dejar claro que era un mensaje que realmente quería transmitir, no un simple desliz, y recordó una anécdota: "A los 79 años puedes decir lo que te salga del nabo porque... Al principio de mi carrera me decían que no podía decir que tenía novia. La compañía de discos me lo prohibía porque así las fans subían".
Además de su situación sentimental, el artista comentó otras cosas que le prohibían hacer públicas ante la prensa: "Cuando crecimos, ya me decían: "¡No digas la tendencia política! La gente se pone en contra" Todo el tiempo reprimido, me cago...".
