La Xunta de Galicia, a través de la Secretaría Xeral de Medios, realizará mañana el mayor apagado analógico de los realizados hasta ahora, con la desconexión de los centros emisores de las grandes ciudades gallegas, una acción que beneficiará a cerca de un millón de personas y ante la que el departamento autonómico ha decidido "incrementar" el personal de recepción de llamadas y "reforzar" los técnicos de guardia para hacer frente al "posible aluvión" de incidencias.

Así lo aseguró el subdirector xeral de Enseñaría e Planificación de Telecomunicación, Ignacio Otero, quien recordó que las desconexiones realizadas durante estas dos semanas han beneficiado "como mucho" a 170.000 personas en un mismo día -en el caso de Ares-, mientras que mañana la población que accederá a la TDT rondará "las 900.000 personas".

"Suponemos que el número de incidencias puede incrementarse", explicó Otero, y por ese motivo la Xunta ha decidido "incrementar el personal" en las líneas de información -012 y 981 572 154- y "reforzar" la plantilla de instaladores y técnicos de guardia para hacer frente a las incidencias.

Otero consideró que, aún esperando un "aluvión de llamadas", lo más probable es que "no se produzcan", dado que los días "más conflictivos" en este ámbito fueron los primeros de este proceso, el 18 y 19 de enero. En esta línea, explicó que en las grandes ciudades gallegas, que mañana accederán únicamente a la TDT, la digitalización "está hecha desde hace años", por lo que la cobertura es "buena".

Mañana se llevarán a cabo los últimos apagados de las fases I y II de este proceso en Galicia, con la desconexión de los emisores de Ares, Arou, Cabanas, Cariño-Ortigueira, Cerdido, Doniños, Ortigueira, Penamoa, Vimianzo y Xaviña, en el área de Ares; y los de Almorfe, Arnoia, Avión, Chandrexa, Crecente, Leiro, Lobios (I y II), Meda, Nogueira de Ramuín, Ourense, Pantón, Pontevedra, Sobradelo y Xunqueira de Espadañedo, en Ourense.