La excelencia, por encima del sobresaliente, es muy difícil de conseguir en las pruebas PISA y en el día a día de las clases en los colegios de todo el mundo. De este modo lo refleja el informe PISA. El porcentaje de alumnos brillantes en Galicia en todas las pruebas PISA (comprensión lectora, matemáticas y ciencias) no alcanza el 1%, lejos del 4% del alumnado de matrícula de honor de Finlandia, por ejemplo.

No obstante, la ínfima representación de la excelencia en el balance gallego no es una excepción. Al contrario, en la media de los estudiantes españoles tampoco se llega al 1% de alumnos más que sobresalientes. Por ejemplo, en lectura e interpretación de textos son muy pocos los "excelentes" en todo el mundo. Solo un 3% de los estudiantes gallegos de 15 años, al igual que la media en el país, sacó un 10 (equivalente al nivel 5 del informe PISA), pero ninguna comunidad alcanza niveles de excelencia.

Curiosamente matemáticas, la materia que presenta peores resultados en Galicia, con un 20% de suspensos, es el área donde los gallegos apuntan mejores calificaciones. Es decir, una materia de extremos: se suspende bastante pero, a los que se les da bien, destacan por encima de la media nacional. Así es que el 6% del alumnado gallego sacó sobresaliente y un 1% alcanzó la excelencia. Pese a no estar mal, Corea del Sur se sitúa a la cabeza, con un 8% de "excelentes", un 6% en Japón, un 5% en Finlandia y Alemania y un 4% de chicos y chicas brillantes en Canadá y Países Bajos. Algunas comunidades españolas se lucen más que la gallega en cracks del cálculo: La Rioja consigue un 4% de estudiantes en el nivel de la excelencia; Castilla y León y Aragón alcanzan un 3% y, llegan al 2%, País Vasco, Navarra, Cataluña, Madrid, Asturias, Suecia y Cantabria.

En ciencias, un 5% del alumnado gallego es sobresaliente pero no se detectaron, en las últimas pruebas de PISA, estudiantes "excelentes". Solo Finlandia, Alemania y Reino Unido alcanzaron un porcentaje mínimo, un 1% de media, de brillantes en el área científica, pero la gran parte de los países y autonomías participantes se quedan en el sobresaliente y sin grandes porcentajes.