El sistema de financiación universitaria diseñado por el Gobierno gallego para el próximo quinquenio no cumplirá con los objetivos previstos ni en el escenario más optimista. Un estudio elaborado por las universidades de Santiago y Vigo ha calculado el volumen de recursos que recibirán las tres instituciones gallegas en los próximos cinco años con el actual modelo económico. Y según sus estimaciones -realizadas teniendo en cuenta un crecimiento de la economía y un descenso atenuado del número de alumnos-, ni se alcanzaría el objetivo de destinar en 2015 a las universidades el uno por ciento del PIB ni se lograría la inversión media prevista por estudiante de 6.255 euros.

La financiación por alumno quedaría rebajada a 5.832 euros -ahora se sitúa en 5.409 por debajo de la media estatal de 5.791 euros- y el esfuerzo inversor en relación a la riqueza de la comunidad autónoma sería del 0,66%. "Estaría bastante alejado de la declaración de intenciones de la Consellería de Educación", expuso la profesora del departamento de Economía Financiera de la Universidade de Santiago, que elaboró el estudio conjuntamente con el profesor Alberto Vaquero, de la Universidade de Vigo.

En el transcurso de unas jornadas en Santiago sobre los retos de la financiación universitaria, Sara López explicó además que en la actualidad el sistema universitario gallego sigue por debajo de la media española en inversión por estudiante, a pesar de que en los últimos años se han ido recortando distancias. Por el contrario, Galicia está por encima de los valores medios estatales de esfuerzo financiero de la Administración, es decir se transfieren más fondos a las universidades en comparación con otras autonomías.

Estos dos indicadores revelan, según Sara López, que a pesar del "esfuerzo importante" de la Xunta en financiar las universidades, esos recursos siguen sin ser suficientes.

El profesor de Economía Aplicada, Santiago Lago, que acudió a las jornadas en representación de la Universidade de Vigo suscribió el análisis de Sara López pero advirtió que "con los mismos recursos se pueden hacer las cosas mejor" y abogó por concentrar los esfuerzos de manera selectiva en aquellas áreas en las que se puedan obtener mejores rendimientos. "No es posible que tengamos en Galicia universidades punteras en todo, hay que especializarse y potenciar nuestro liderazgo en áreas concretas", señaló.

Esto implicaría, sin embargo, que al final cada universidad debe "discriminar y darle más recursos a unos y menos a otros".

Si se consigue que los campus gallegos destaquen a nivel internacional en alguna materia, entonces el sistema universitario de Galicia podrá captar recursos humanos de primera mano, tal y como demandó Lago Peñas. En su opinión, los campus de excelencia proyectados las universidades gallegas van en esta dirección de especializarse y buscar el liderazgo en áreas concretas.

Aunque era el nuevo modelo de financiación universitaria lo que estaba a debate, el vicerrector de Economía de la Universidade da Coruña, Ángel Fernández Castro, no quiso entrar a valorar un plan "del que aún se están perfilando los últimos flecos". Por esta razón, se limitó a advertir la escasez de recursos públicos y abogó por "una mayor eficiencia y rendición de cuentas".

La jornada sobre financiación universitaria fue inaugurada por el conselleiro de Educación, Jesús Vázquez, quien recordó que el decálogo de medidas de recorte del gasto acordado con las tres universidades es "voluntario", al tiempo que defendió la búsqueda de capital privado como fórmula para aumentar los ingresos de los campus gallegos.

"¿De qué vale discutir sobre el modelo de financiación universitaria si después el 70% del dinero se dedicará a pagar nóminas?". Ésta fue una de las preguntas que los asistentes a las jornadas, organizadas por la Consellería de Educación, plantearon a los representantes de los campus gallegos y al secretario xeral de Universidades, José Alberto Díez de Castro.

El alto cargo de Educación le dio la razón: "el gasto en salarios es muy alto". Pero añadió que "hay margen" para el ahorro. En primer lugar, se pueden rebajar costes en gasto corriente y, como ejemplo, advirtió que en las universidades gallegas "hay una ineficiencia brutal" con la compra de equipos y material tecnológico.

"Se duplican equipos porque a veces un departamento no quiere prestárselo a otro o porque ni siquiera está al tanto de disponen de ese material tecnológico", se quejó el director xeral de Universidades.

Y, en cuanto al personal, el secretario xeral de Universidades advirtió a las rectores que deben planificar mejor sus necesidades de personal. En su opinión, hay que programar las plantillas a largo plazo para garantizar que con los años no queden departamentos con carencias de docentes y otros sobredimensionados.

Sobre el posible incremento de las tasas universitarias para aumentar los recursos universitarios el secretario xeral de Universidades advirtió que ésa es una de las medidas propuestas pero también hay otras fórmulas como potenciar la oferta de formación continua en los campus como otra posible vía de ingresos.