Los astronautas estadounidenses Mike Fossum y Ron Garan aseguran que confían en la experiencia rusa para determinar el fallo que causó la pérdida de un carguero ruso con suministros a tiempo para evitar que la Estación Espacial Internacional (EEI) quede prácticamente deshabitada.

"Los rusos tienen mucha experiencia con este tipo de cohetes", afirma Fossum, que se muestra tranquilo a pesar de que, de no arreglarse el problema, su vuelta a la Tierra, junto con el ruso Sergei Volkov y el japonés Satoshi Furukawa, podría significar cerrar la escotilla de la Estación Espacial Internacional y dejarla sin tripulación.