El fundador de Virgin Galactic, Sir Richard Branson, y la gobernadora del estado de Nuevo México, Susana Martínez, inauguraron el pasado lunes la terminal y el hangar que será la base de operaciones de la compañía de vuelos suborbitales en Spaceport America (Nuevo México). Construido con una moderna estructura de metal y paneles de vidrio, con base en un proyecto elaborado por los estudios de arquitectura de Norman Foster, el nuevo edificio ha sido concebido de acuerdo a criterios de sostenibilidad que incluyen un novedoso sistema de calefacción y refrigeración geotérmico.

La nueva terminal se sitúa frente a la pista de 3,2 kilómetros de longitud que fue inaugurada ahora hace un año. La terminal, que ha sido bautizada como Virgin Galactic Gateaway to Space, marca un nuevo hito en el proyecto de Virgin Galactic y está previsto que albergue las naves de la compañía (dos naves nodriza WK2 y hasta cinco naves espaciales SS2), el centro de control y un área de entrenamiento para los futuros turistas espaciales.

Nuevo sector industrial

"Hoy es un día histórico para Virgin Galactic", aseguró Richard Branson, quien se mostró satisfecho de liderar el camino hacia la creación de uno de los nuevos sectores industriales, auguró, más importantes del siglo XXI. "Nunca hemos dudado en nuestro compromiso de ser pioneros a la hora de ofrecer un acceso al espacio seguro y asequible y demostramos que vamos en serio en cada paso del camino", afirmó el empresario británico.

Un total de 450 personas han reservado ya en todo el mundo su vuelo suborbital con Virgin Galactic. En España, BRU & BRU Exclusive Travel Designer es la única agencia acreditada para comercializar los vuelos de Virgin Galactic.

Hasta el momento, la agencia tiene un total de 12 reservas formalizadas de viajes que tienen un precio de 200.000 dólares: unos 170.000 euros al cambio actual. La directora, Ana Bru, será además la primera mujer española que volará al espacio con Virgin Galactic y ya ha realizado los primeros entrenamientos en el centro espacial Nastar de Filadelfia.

Durante todo este año, la nave nodriza White Knight Two y la nave espacial Space Ship Two han realizado su programa de vuelos de test con total éxito. Aparte del turismo espacial, la investigación es otro de los retos de Virgin Galactic. Esta misma semana, la NASA ha firmado un contrato con la compañía de 4,5 millones de dólares (3,29 millones de euros) con el fin de fletar de uno hasta tres vuelos suborbitales con finalidades científicas.