Agentes de la Policía Nacional han detenido a un hombre de unos 30 años en Ourense por un delito de corrupción de menores, con los que conectaba a través de internet. El arresto se llevó a cabo gracias a la colaboración de una red social, que alertó de que había recibido una denuncia de un usuario que estaba siendo amenazado a través de esta plataforma, según informó ayer el Ministerio de Interior.
El arrestado contactaba con sus víctimas a través de internet o aplicaciones de mensajería instantánea para smartphones y les solicitaba actos de carácter sexual mediante amenazas, según indican fuentes de Interior, donde precisan que al detenido le constan actualmente trece órdenes de alejamiento sobre menores por hechos similares.
La investigación comenzó con la denuncia trasladada por la red social Tuenti a la Brigada de Investigación Tecnológica de la Policía Nacional, en la que se explicaba que uno de sus usuarios, menor de edad, había sido amenazado con fines sexuales, por lo que aportó los datos del perfil desde el que se hacían las amenazas, además de las IP de conexión al mismo.
Paralelamente a la denuncia de la plataforma social, el padre de otro menor de 15 años, también en Ourense, se personó en dependencias policiales comunicando que su hijo estaba recibiendo peticiones de tipo sexual a través de mensajería instantánea para smartphones, agrega Interior a través de un comunicado.
Los policías comenzaron a investigar el número de teléfono desde donde se enviaban dichos mensajes y que coincidía con el número facilitado por el investigado en sus conversaciones en las redes sociales.
Tras la comprobación de varios delitos, la Policía detuvo al hombre, entre cuyos efectos no se localizó ningún teléfono móvil, por lo que se procedió a la entrada y registro de su domicilio, donde tampoco se encontró el terminal telefónico.
El arrestado, con antecedentes por delitos de amenazas, robo con violencia o intimidación y contra la libertad sexual, confesó que se había desprendido de él con anterioridad por miedo a ser detectado por los agentes
La operación ha sido realizada por la Brigada de Investigación Tecnológica de la UDEF Central en colaboración con el Grupo I de Protección al menor y el Grupo II del Servicio de Atención a la Familia de Ourense.
La operación que ha culminado con el arresto fue desarrollada en un periodo de dos meses desde el conocimiento del delito hasta la detención del individuo gracias a la "estrecha" colaboración de la Policía con la red social Tuenti. Según explicaron ayer fuentes de este cuerpo de seguridad, este tipo de denuncias suelen resolverse en un periodo más largo: entre seis meses y un año.
La red social Tuenti, popular entre adolescentes y jóvenes españoles, revisa al día 15.000 perfiles de sus usuarios, sospechosos de emplear este foro para cometer algún tipo de delito, de los cuales 1.500 son retirados, según explicó ayer el director del departamento jurídico de Tuenti, Óscar Casado. A raíz de la denuncia del menor de Ourense, Tuenti -con 13 millones de usuarios registrados- inició el protocolo de "monitorización proactiva" de perfiles sospechosos, localizó el perfil del detenido, la dirección IP y salvaguardó la información para que no borrase los mensajes.
