Un joven aficionado a la pesca de unos 30 años cruza la puerta de Urgencias del hospital Xeral de Vigo con un arpón que le atraviesa la cabeza, de oreja a oreja. Está consciente. El impacto del disparo "de baja energía", como se conoce en el argot médico, ha cruzado el cerebro, desde hueso parietal izquierdo al derecho; pero sigue vivo.

Este relato se corresponde con un caso real, ocurrido hace unos tres años en el Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi) y aquel joven, como el que estos días se hizo público en EEUU, sobrevivió. Las semejanzas del caso han hecho que la experta neurocirujana que lo atendió, Rosa Martínez, acceda a recordarlo. "El chico nos llegó por Urgencias con el arpón clavado en la cabeza, consciente y despierto", explica la médica de Vigo que gestionó aquella sorprendente urgencia. "El arpón medía un metro y medio aproximadamente y lo tenía clavado de oreja a oreja", relata sobre el instrumento de pesca. Lo más curioso es que, según los testigos, el chico hablaba y obedecía; lo que indica que también entendía perfectamente y procesaba la información de forma correcta aún con el arma en la cabeza. Su aparatosidad obligó a cortar el arpón antes de operar al paciente. Lo hicieron ellos mismos con un cortafríos, sin recurrir a bomberos.

Fue precisa una craneotomía -intervención consistente en quitar una pequeña porción de hueso del cráneo- para extirparlo con el paciente sedado y dormido. De cada lado del arpón tuvieron que perforar la cabeza del paciente. Luego, para extraerlo se necesita retirarlo por el orificio de salida, nunca por el de entrada. Tras la operación y para la sorpresa de todo el equipo médico, en el postoperatorio descubrieron que no había hemorragias, ni ninguna arteria afectada. Eso sí, para evitar que su cerebro se inflamase o sufriera, el paciente estuvo semanas sedado. Al despertar, una nueva sorpresa: "Movía brazos y piernas, veía... era coherente", explican los médicos . "Te asombra que venga un paciente con eso en la cabeza y que no le haya tocado a nada importante", reconocen.