"Horrible", "choni" y "poligonero". Estos son algunos de los despectivos epítetos que ha cosechado en las redes sociales la equipación que lucirán los deportistas españoles en las Olimpiadas de Londres. Incluso hay quien opina que, más que para ir a por el oro, es para robar cobre. El reguero de tuits no cesa, pero lo que más molesta es que se haya elegido a una firma extranjera, la italo-rusa Bosco Sport, en detrimento del muy reputado diseño patrio.

El Comité Olímpico Español se defiende de las acerbas críticas con el argumento de que la firma da las prendas gratis y hasta paga 250.000 euros al año por que se luzcan. Y el diseñador, en el ojo del huracán, arguye que se empapó de folclore español antes de ponerse a dibujar y hacer patrones. Entonces, se preguntan muchos, ¿cómo es posible que los uniformes se parezcan tanto a los de los deportistas rusos?

Escuece también la elección porque Estados Unidos irá de Ralph Lauren, Reino Unido de Adidas e Italia de Emporio Armani.

La polémica está servida, y en el hervidero de las redes sociales y el campo abonado para el linchamiento que es internet hace días que no se habla de otra cosa, con excepción, quizá, del "que se jodan" de Andrea Fabra y el nuevo hachazo a la clase media del Gobierno.

La equipación ya fue muy criticada cuando Bosco Sport presentó los diseños preliminares, y la cosa empeoró cuando presentó el chándal. Era mayo, pero llovieron piedras. Que si era "choni", que si "de todo a 100". Finalmente, el velocista Ángel David Rodríguez colgó en su cuenta de Twitter (@ADRpajaro) fotos de cuatro elementos de la equipación: el polo, las zapatillas, la corbata y la mochila. Tres de ellos los tienen a la derecha de estas líneas para que juzguen.

Guerra de 'tuits'