Algo más de 8.000 europeas viajan cada año a España para realizarse un tratamiento de reproducción asistida, debido a que la legislación española es más progresista que en otros países y por la calidad asistencial, la profesionalidad y los buenos resultados que ofrecen los centros españoles. Así lo aseguró ayer Carmen Calatayud, codirectora de CREA, centro médico de reproducción asistida con sede en Valencia, quien señaló que el periodo estival es el que registra mayor flujo migratorio, ya que las parejas aprovechan sus vacaciones para realizarse tratamientos de reproducción asistida.

Calatayud afirmó que, según datos del grupo Fertility Counts (formado por miembros de la Sociedad Europa de Fertilidad), aproximadamente unas 25.000 europeas viajan cada año dentro de Europa para realizarse un tratamiento de reproducción asistida, y la tercera parte de ellas lo hace a España debido a la calidad de sus centros de reproducción.