El Banco de Tapones del Baixo Miño, situado en Tomiño (Pontevedra), ha logrado reunir en un mes y medio diez toneladas de tapones de plástico que permitirán comprar un traje especial de 2.500 euros que necesita un niño vigués de seis años que sufre parálisis cerebral.

Este banco de tapones creó un grupo en Facebook y en mes y medio logró que 20.000 personas formen parte de él a través de la red social. Además, han conseguido la puesta en marcha de 83 puntos de recogida de tapones en colegios, supermercados y tiendas de las cuatro provincias gallegas. Los tapones que logra reunir el banco se venden posteriormente a una empresa de O Porriño que paga 250 euros por cada tonelada.