Un equipo de científicos de la Universidad de Barcelona (UB) ha descubierto que la hormona FGF21, clave en el control de la obesidad, también tiene efectos cardioprotectores en ratones de laboratorio. Los investigadores han comparado la función cardíaca de un grupo de ratones a los que se les desproveyó del gen codificado de la hormona FGF21 (que libera el hígado en respuesta a los lípidos de la dieta) y otros que la conservaban. El resultado fue que los ratones a los que se les anuló el gen mostraron un cuadro de patologías cardíacas, comprobadas a través de ecocardiografías y electrocardiogramas.