El Papa ha aceptado la renuncia presentada por el obispo de Waterford y Lismore (Irlanda), William Lee, después de que él mismo admitiese que había actuado de forma "inadecuada" en un caso de supuestos abusos sexuales contra menores cometidos por un sacerdote, informó hoy el Vaticano. Como es la praxis, el Vaticano informa de la renuncia basada en el canon 401 párrafo 2 del Código Canónico, que obliga a los prelados a renunciar de su cargo en el caso de "faltas graves o enfermedad".

Lee había calificado en 2010 de "seriamente inadecuada" su actuación en las investigaciones sobre abusos sexuales cometidos contra menores por un sacerdote, que no identificó, de su diócesis del sureste de Irlanda. El obispo pidió perdón por tardar dos años en trasladar a la policía las acusaciones.