Uno de los quintos premios descargó un aluvión de millones en Premiá de Mar (Barcelona) repartidos en decenas de participaciones, que se quedaron jugadores, directivos y familiares del club de fútbol del colegio La Salle. La administración de lotería vendió íntegras las 160 series del 55.695, agraciado con 9,6 millones de euros. La lotera subrayó que esta cifra "alegra y asusta a la vez" y destacó que estuvo toda la mañana recibiendo llamadas de teléfono.

Otro quinto que se vendió de forma íntegra en un solo lugar fue el 52.754, que fuera para Loja (Granada). Un total de 9 millones de euros se distribuyeron en 1.600 décimos por todo el municipio entre vecinos, peñas e incluso una cadena de restaurantes y un centro de mayores. La propietaria de la administración número 1, Mari Pepa Burgos, aseguró que los décimos "están muy repartidos" y se vendieron en su mayoría en ventanilla.

Pamplona y La Bruixa d´or de Sort (Lleida) repartieron suerte con el número 81.854. El Híper Eroski de Pamplona vendió sesenta series y un resguardo de terminal y el establecimiento Golosinas y loterías San Jorge, dos décimos.

La lotera del híper subrayó que están "muy felices" de haber repartido este premio "en un año tan duro para todos". Esta administración repartió boletos en empresas y muchos bares, entre estos últimos el Endika, en el barrio de Chantrea, regentado hace tres años por una familia de origen chino. Según uno de los hijos del propietario de la cafetería, entre los agraciados hay muchos desempleados. Otro bar donde se repartió suerte fue el Poli de Noáin, y también en la empresa Bobinados Labrit.

La Bruja de Sort vendió dos quintos, el 14.850 y el 81.854, pero en total repartió hasta 33 millones de euros. "Es fantástico, es increíble", subrayó el propietario, Xabier Gabriel. "La bruja está contenta", declaró. Gabriel recordó que su despacho fue este año el primero del mundo en entrar en Twitter y ayer "los tuiteros se estaban volviendo locos". El 81.854 también llegó a Galicia, a Celanova y Allariz.

Un despacho de loterías de Benidorm (Alicante) vendió, sobre todo en verano, los 1.600 décimos de otro quinto premio, el 48.589. El lotero, Nacho Álvarez, estaba a punto de cerrar para tomar un aperitivo con su hermana cuando recibió la llamada de una de sus agraciadas, que vive en Barcelona y veranea en Benidorm. También conoce a otro agraciado, un cliente "de toda la vida".

A Laracha (A Coruña) contó con la suerte de repartir un quinto, el 81.156, que también fue vendido en Salamanca. En el bar Altamira de la localidad salmantina de Lumbrales se vendieron los décimos por terminal electrónica. Esta cafetería juega un número fijo hace años, el 82.156, pero como se agotó pidieron el más parecido, el 81.156, que resultó agraciado. Algunos décimos de este billete también se repartieron en Zaragoza, en una administración y en una tienda. En la administración número 70 la hija del dueño, Brigite, aseguró que despachó diez décimos por ventanilla, 60.000 euros, y toda la serie fue "adquirida por la misma persona".

La comunidad aragonesa fue muy agraciada con la fortuna al repartir hasta cuatro quintos premios. El 17.320 viajó a la ciudad de Jaca el lotero, José Luis, vendió toda una serie del número el pasado mes de julio. Del 05.721 se quedó parte en la localidad aragonesa de Brea de Aragón, donde el bar Erika vendió parte del premio por terminal. La administración Don Pepe vendió tan solo un décimo, según confirmó su responsable, Merche Barbero.

Este número fue repartido por localidades de casi toda España, entre ellas Santiago de Compostela. En León la administración Santa Bárbara, ubicada en un centro comercial, vendió cuatro de las cinco series de este número y sus propietarias brindaron con champán para celebrarlo.