CIG-Saúde denuncia que el Sergas cerrará durante 120 días -en el periodo estival- más de 1.200 camas hospitalarias diarias (el año pasado se cerraron 930) lo que, a su juicio, "provocará problemas asistenciales" como "la paralización de la actividad quirúrgica" y "el incremento de las listas de espera".

A ello, la central sindical suma problemas como la saturación de los servicios de urgencia y una presión sobre los hospitales y sobre el personal sanitario "para reducir tanto el número de ingresos como el tiempo de estancia media de hospitalización".

El sindicato tan solo da datos de dos hospitales. El Complexo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi), que durante el verano, se cerrarán "1.240 camas" y en el de Lugo más de 400, "siguiendo un criterio rotacional que no tiene en cuenta el índice de ocupación", añade.

La secretaria nacional de CIG-Saúde, María Xosé Abuín, señala que "en vez de priorizar la salud de los gallegos, sus necesidades de atención sanitaria y la necesaria calidad asistencial para los pacientes, el Sergas prioriza el ahorro que se añade a los recortes presupuestarios". "Si no hay actividad, no hay gasto y esa es una de las máximas de este gobierno", resaltó. Abuín considera que esta medida "provocará inevitablemente el incremento del sufrimiento de las personas frente a la enfermedad, al retrasar el acceso a las prestaciones".