El modisto gallego Adolfo Domínguez recogió ayer de manos de la princesa de Asturias el Premio Nacional al Diseñador -dentro de la modalidad de mejor trayectoria profesional- en la primera edición de los Premios Nacionales de la Moda. La futura reina presidió la entrega de los galardones, su primer acto en solitario tras conocerse la noticia de la abdicación del Rey. El diseñador Adolfo Domínguez competía en esa categoría con los también veteranos gallegos del textil Roberto Verino y Pili Carrera.

La princesa Letizia solo tuvo palabras de alabanza para el sector de la moda. "Es un sector que estimula la economía y es una forma de expresión con origen en la creatividad", resaltó la Princesa, que llegó acompañada por el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, con quien fue entregando los premios en cinco categorías al sector de la moda.

Junto a Domínguez, el creador vasco Roberto Etxeberría se llevó el premio al Diseñador Nuevo Valor; el grupo Cortefiel recibió el Premio Nacional a la Gran Empresa de la Industria en el Sector de la Moda y la firma Mirto se alzó con el Nacional a la mejor pyme.

Letizia, que lució un sencillo vestido gris piedra adornado con líneas verticales de cristales y zapatos de corte salón del mismo tono, mostró su admiración por los profesionales del mundo de la moda, que, según señaló, "son un gran ejemplo del trabajo en equipo, y de que unidos, las cosas salen mejor". Durante la ceremonia de entrega de estos galardones y en su primera declaración tras conocerse que será proclamada reina este mismo mes, destacó que la moda es una industria que "genera empleo y estimula por tanto la economía". "Es una seña de identidad y una forma de expresión con origen en la creatividad y que, en definitiva, implica el esfuerzo de muchísimas personas" para ofrecer el producto final "de la manera más eficiente y excelente".

"Quiero reconocer ese trabajo y ese esfuerzo en todos los profesionales implicados en esta industria, que además contribuye de una manera esencial a fortalecer nuestra marca España", enfatizó, apelando también a la Formación Profesional y a la oferta en los ciclos de grado medio y superior de la industria de la moda.

Durante su intervención, Letizia felicitó a los premiados en este evento y agradecido su "profesionalidad", su "esfuerzo", así como la "magia que distingue" a esta industria. "Gracias a todos por seguir ahí, con ilusión y ánimo a pesar de las dificultades, creando moda", concluyó la futura reina.

Por su parte, el modisto gallego Adolfo Domínguez se mostró ayer "muy agradecido" por el premio, y señaló que es "un honor" haber recibido el galardón de manos de la princesa de Asturias y que, aunque no entra a valorar su estilo, le "gusta" que la futura Reina "vista de marca España". Para el empresario gallego que, con humor, declaró que "hay tantos palos en la vida que un premio es una alegría", la monarquía española sin lugar a dudas "comunica, ayuda y vende" y, en este sentido, señaló que en los países que ha visitado "a los Príncipes se les conoce más que a cualquier presidente de una república".

El Premio Nacional reconoce la trayectoria de este modisto gallego como fundador, diseñador y presidente de Adolfo Domínguez, una compañía que nació en la década de los 70 y que ya está presente en 40 países.