Ayudar a los más necesitados a través de una ONG es posible incluso después de muerto. Para ello basta con realizar un legado solidario, es decir, dejar parte de la herencia a una entidad de este tipo. Pese a que, por el momento, este tipo de testamentos son minoritarios, cada día ganan más adeptos. Solo Unicef -una de las 24 organizaciones que participan en la campaña Legado Solidario- recibió 3,4 millones de euros a través de 20 herencias ejecutadas durante el pasado año, de los que un total de 40.149 euros procedían de fallecidos en la comunidad gallega. "Es difícil concretar el número de testamentos solidarios realizados porque muchos no se conocen hasta que se ejecutan, pero estimamos que Galicia está entre las ocho comunidades con mayor número", señalan desde el proyecto Legado Solidario.

Los interesados en dejar algo en herencia a una ONG simplemente deben especificarlo ante notario cuando realicen testamento. El Código Civil divide la herencia en tres partes: el tercio de legítima -se reparte entre los hijos a partes iguales-; el tercio de mejora -se reparte también entre hijos y descendientes pero no tiene porqué ser a partes iguales, decide el testador- y el tercio de libre disposición, dónde el testador tiene plena libertad para dejárselo a quien quiera. Es en esta parte donde se puede legar a entidades no gubernamentales. En herencia se les puede dejar desde cosas concretas como un inmueble, un coche o joyas hasta dinero en metálico, acciones o un porcentaje del patrimonio. "La única limitación legal es respetar la cuota de la legítima de los herederos forzosos", indican desde Legado Solidario.

"No queremos ir en perjuicio de los seres queridos y familiares. Se puede ceder un bien concreto, si se quiere entregar más bienes a otras personas, poner a la ONG de coheredero o si no hay herederos, nombrar a la entidad heredero universal y cederle todos sus bienes", aclaran desde Unicef Galicia, donde explican que en la comunidad gallega la mayoría de legados son de "dinero en metálico e inmuebles como pisos o locales".

Desde las ONG que colaboran con Legado Solidario recuerdan que incluir a una entidad en el testamento no supone un coste adicional -hacer testamento ante notario cuesta unos 40 euros- y que es una decisión que puede revocarse en cualquier momento ya que el testamento puedo cambiarse tantas veces como sea necesario. El legado llega siempre a la ONG porque el testador bien puede informar en vida a la entidad de qué bienes le deja o tras su fallecimiento, el notario avisará a todos los herederos.

Estas aportaciones a través de los legados solidarios se utilizan para llevar a cabo los proyectos de cada ONG. "Cualquier aportación supondrá mucho para Unicef y para la vida de muchos niños en el mundo. Las herencias y donaciones nos proporcionan recursos económicos para atender las constantes emergencias que afectan a la infancia además de suponer una fuente de fondos flexible para financiar proyectos prioritarios y contribuirá a financiar otros proyectos que, de otro modo, podrían tardar años en ser apoyados económicamente", indican desde Unicef Galicia, donde el pasado año incrementaron en 40.000 euros sus cuentas gracias a herencias solidarias de gallegos.