La fotógrafa Isabel Steva Hernández, Colita, renunció ayer al Premio Nacional de Fotografía por considerar al Ministerio de Educación, Cultura y Deporte responsable de que la cultura y la educación en España se encuentren en una situación de "pena, vergüenza y dolor de corazón". En una carta hecha pública ayer a través de las redes sociales y dirigida al ministro José Ignacio Wert, Colita aclara que su renuncia "nada tiene que ver" con la cuestión catalana y agradece al jurado del premio que hayan pensado en ella.