El Hospital San Rafael de A Coruña fue el primer centro hospitalario gallego en contar con el robot Da Vinci modelo Xi, un equipamiento de última generación que, hasta el pasado mes de noviembre, solo estaba disponible en el Clinic de Barcelona. El robot, cuyo coste supera los dos millones de euros, permite a los cirujanos la máxima precisión y total libertad de movimientos y giros a la hora de intervenir y, además, abrirá la posibilidad de utilizar un único puerto de entrada para operar. De momento, el hospital coruñés lo utiliza en cirugía urológica, en especial para extirpar tumores de próstata y renales, pero estudia su aplicación en otras especialidades como cirugía digestiva, torácica, ginecológica o cardíaca.

-¿Qué ventajas ofrece el robot Da Vinci Xi frente a otras alternativas quirúrgicas?

-Comparada con las cirugías abierta y laparoscópica, esta alta tecnología ofrece, fundamentalmente, una mayor precisión. La libertad de movimiento del brazo robótico es mucho mayor que la de la mano. Además, su gran calidad de visión -cuenta con un sistema de visualización de alto rendimiento en 3D- permite acercarse mucho a la zona a tratar.

-¿Los resultados de la cirugía robótica son también muy superiores a los de las otras técnicas?

-Así es. Este es el sistema más evolucionado y preciso que existe tanto en cirugía de la próstata como para otros tipos de intervenciones quirúrgicas, como los cánceres de vejiga o riñón, o los prolapsos de órganos pélvicos en mujeres. Y fuera de la urología, en cirugías de esófago, torácicas, para cáncer de colon... En todos los casos, el postoperatorio mejora considerablemente, al reducirse muchísimo el riesgo de sangrado y de infecciones, lo que permite a los pacientes incorporarse antes a sus quehaceres diarios.

-¿El robot Da Vinci Xi tiene algo que mejorar?

-En la actualidad, este modelo es el más evolucionado y preciso que existe, pero cada generación introducirá pequeñas mejoras. En los próximos meses, de hecho, se lanzará una nueva evolución que tiene previsto incorporarse también en el Hospital San Rafael, que ofrecerá la posibilidad de operar a través de un único orificio (ahora se hace a través de varios puntos de entrada muy pequeños).

-¿Cuántas cirugías han practicado ya en el Hospital San Rafael con esta alta tecnología?

-Menos de diez, pero el porcentaje de beneficiarios potenciales es muy alto.

-¿Qué pacientes son candidatos a ser intervenidos con Da Vinci Xi?

-Desde un estricto punto de vista médico, todos los pacientes podrían ser candidatos a someterse a este tipo de cirugía, aunque en los pacientes jóvenes el beneficio podría ser incluso superior que en el resto de casos, debido al tema de la potencia sexual, ya que el robot permite conservarla hasta en un 80%.

-¿Hasta dónde llegará la cirugía robótica en el futuro?

-La cirugía robótica es ya el presente, casi todo se va a acabar haciendo mediante esta alta tecnología, pero lo que va a marcar su extensión es el coste. En la actualidad, los equipos son tan caros porque una única empresa tiene todas las patentes a nivel internacional, y entonces los costes están un poco supeditados a los precios que ellos establezcan.