La contaminación y la degradación del medio ambiente causan la muerte prematura de 12,6 millones de personas al año, cifra 234 veces superior a la que provocan los conflictos armados, según un informe presentado ayer en la inauguración de la segunda Asamblea de las Naciones Unidas para el Medioambiente (UNEA-2), que esta semana reúne en Nairobi a delegados de 173 países para establecer acuerdos que permitan un desarrollo sostenible.

La asamblea, la institución más importante a nivel mundial en materia medioambiental, tiene por objetivo introducir una nueva perspectiva en la defensa de la naturaleza: la protección de la salud humana. "Nuestras economías matan a mucha gente en el nombre del desarrollo, una de cada cuatro o cinco muertes prematuras son causadas por nosotros mismos. Es lo que se llama matanza o asesinato", aseveró el director del Programa de Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente, Achim Steiner. Más del 25% de las muertes de niños menores de cinco años se deben al deterioro del medio natural.