El estado de salud del disidente y Nobel de la Paz chino Liu Xiaobo, que padece un cáncer de hígado terminal, empeoró en estos últimos días y sus allegados creen que podría fallecer pronto.

El edema abdominal que sufre Liu empeoró debido a una mayor acumulación de líquido, por lo que se envió a un equipo médico, dirigido por el destacado experto Mao Yilei, para revisar su estado y el tratamiento a seguir, según indicaron en un comunicado los responsables del centro hospitalario en el que está ingresado.

Además, las autoridades pidieron a los allegados de Liu que estén disponibles durante las próximas veinticuatro horas, en un signo de alarma, confirmó ayer un amigo de la familia, el activista Ye Du, en un mensaje enviado a los medios de comunicación.

"Podríamos perder pronto a Xiaobo", manifestó Ye.