Primer episodio de la tercera temporada de la serie Black Mirror. Título: Caída en picado. En él se describe una sociedad en la que el valor de las personas depende de la cantidad de likes que reciben. Todo gira alrededor de las interacciones con los demás. Si alguien hace algo bien (a ojos de otra persona) gana puntos. Si hace algo mal (a ojos de otra persona) pierde puntos. El acceso a una vivienda barata o a un apartamento de lujo depende de la puntuación que posean. Si tienen una clasificación negativa tampoco pueden codearse con personas de un estatus económico superior. Es una sociedad obsesionada con las puntuaciones sociales que influye en la vida de las personas.

Pero bueno, es una serie de ficción.

Imagina ahora un país donde un gobierno supervisa todo lo que haces, acumula enormes cantidades de datos por todas las interacciones que realizas y te otorga una puntuación que mide lo confiable eres. Cualquier actividad, como no pagar un préstamo, criticar al partido en el poder, saltarse un semáforo o dejar de cuidar a tus padres te hace perder puntos.

Y en ese país, tu puntuación determina si puedes pedir un préstamo, llevar a tus hijos a las mejores escuelas, reservar una habitación en un hotel de lujo o una mesa en un restaurante de primera.

¿Es uno de esos países de Black Mirror? No. Es China. Su gobierno está desarrollando un sistema de crédito social.

El plan consiste en recopilar toda la información disponible en internet sobre los ciudadanos en un solo lugar y luego asignarles a cada uno una puntuación basada en su crédito político, comercial, social y legal.

No es la primera vez que China intenta algo parecido. En 2010 se puso en marcha un proyecto piloto en el sur del país, que al final fue desestimado. Este sistema otorgaba puntos a los ciudadanos por su buen comportamiento, hasta un máximo de 1.000. Una infracción menor de las reglas de tráfico costaba 20 puntos, y saltarse un semáforo, conducir borracho o pagar un soborno, 50. No cuidar a los familiares ancianos también estaba penado con 50 puntos al igual que usar internet para acusar falsamente a otras personas.

En este plan de crédito social los castigos eran, por ejemplo, no obtener préstamos, prohibición de viajar en primera clase en trenes y aviones, reservar una habitación en un hotel de lujo o enviar a los hijos a las mejores escuelas.

A medio camino entre un episodio de Black Mirror y el caso anterior está Zhima Credit, que se puede encontrar dentro de la aplicación móvil de Alipay, la principal plataforma de pagos electrónicos en China.

Zhima Credit es el sistema de puntuación social ideado por Alibaba, el principal conglomerado de comercio electrónico del mundo, que acumula toneladas de datos de los usuarios gracias a las compras online que realizan.

Esta herramienta analiza la huella financiera digital de un usuario y clasifica su solvencia crediticia en una escala de 350 a 950. Los clientes con puntaciones altas pueden tener préstamos más favorables y acceso a mejores servicios, como no tener que pagar depósitos al alquilar bicicletas, coches o apartamentos. Y muchos beneficios más. ¡Ah! La aplicación también valora dependiendo de las interacciones que tengan con sus amigos en las redes sociales. Como en Black Mirror.