Los gallegos esperan casi un mes menos que hace cinco años para operarse en la sanidad pública. El Servizo Galego de Saúde (Sergas) presentó ayer el balance del primer semestre del año y destaca que el tiempo medio de espera para acceder al quirófano alcanza su récord por abajo desde que hay registros: un total de 56,4 días de media, Povisa incluida. Además, casi dos mil personas menos están pendientes del cirujano con respecto a hace un año, aunque la cifra de quienes aguardan para una intervención todavía ronda las 34.500 personas.

Solo en 24 casos, según el Sergas, cuyo balance semestral presentó ayer su gerente, Antonio Fernández-Campa, tienen que armarse de paciencia más de un año, pero la cifra es la mitad de quienes se hallaban en esa situación en junio de 2018. Quienes menos esperan de media son los pacientes considerados, por su patología y gravedad, de prioridad 1, un total de 1.469 en la lista, aunque en este caso sí tienen que vérselas con plazos más amplios, desde los 14,9 días de junio de 2018 a los 16 de este ejercicio. Ocurre lo contrario entre los de prioridad 2: esperan de media 58,6 días y hace un año lo hacían casi seis días más.

La espera para operarse, con todo, depende de dónde se vive y de qué tipo de intervención se trate. Los tiempos más largos los soporta el área sanitaria de Vigo, con 74,4 días de media, y los más cortos, la de Pontevedra, con un mes menos. En cuanto al servicio, quienes aguardan por una cirugía maxilofacial esperan 55 días más que un niño que debe protagonizar una cirugía del corazón. De hecho, la cirugía maxilofacial requiere este año 71,1 días de media, casi 20 días más de espera que en junio de 2018 y la cardíaca infantil, 8 menos.

Si se alivian las listas para quirófanos, no ocurre lo mismo con las de consultas para especialista o para pruebas: las primeros las conforman en total 168.540 personas, siete mil más que hace un año, y las segundas también suman 7.600 personas más en el último año, hasta superar las 87.000. Además, los que aguardan por una consulta lo hacen 0,3 días más, hasta 37,6 de media, y lo mismo que hace un año (59,1 días) quienes necesitan una radiografía o una ecografía. No obstante, en ambos casos los datos de espera varían mucho según el especialista o la prueba.

Oscilan desde el tope de 46,8 para traumatología „la segunda especialidad más saturada, con más de 26.600 pacientes en cola para consulta„, a pesar de que se redujo en 3,5 días en relación a hace un año, a los mínimos de seis y 7,4 días para medicina nuclear y radioterapia, respectivamente.

Claro que en estos servicios la lista es también muy reducida: 2 pacientes en nuclear y 99 en el caso de radioterapia. Todo lo contrario sucede en oftalmología, donde se bate el récord con 27.500 pacientes pendientes de consulta externa. La espera es la segunda más elevada, con 42 días.