Un hombre de 50 años y con múltiples antecedentes por violencia de género murió ayer tras ser abatido por disparos de la Policía después de apuñalar a dos agentes, uno de ellos gallego, en Vallecas. La agresión se produjo cuando los policías acudieron al domicilio tras la llamada de una mujer alertando de que el novio de su hija estaba amenazándola con quemarla viva y que portaba un cuchillo.

Fuentes policiales explicaron que fue el hombre abatido el que dejó la puerta abierta dejando la casa a oscuras. Los agentes accedieron al inmueble por el pasillo cuando el agresor se abalanzó hacia los agentes con el arma blanca. Ante la agresividad del hombre y para evitar que el ataque continuara, uno de los agentes efectuó dos disparos que acabaron con la vida del agresor.

El agente gallego ya fue dado de alta y el otro evoluciona favorablemente y estaba pendiente también del alta.