Antonio Banderas, candidato al Óscar a mejor actor por su papel en Dolor y gloria, de Pedro Almodóvar, admitió ayer que "es complicado ganar, pero el premio consiste básicamente en esa nominación y en la importancia que tiene para nuestra cinematografía". "He vivido veinticinco años en Los Ángeles, conozco todos los procedimientos para los Óscar y para otros premios y es muy complicado sin estar allí que haya pasado lo que ha pasado, no me lo esperaba sinceramente", dijo Banderas en la presentación de una proyección de Dolor y gloria en Málaga, dentro de los actos previos a la entrega de los Goya en esta ciudad, el próximo día 25.

El intérprete resaltó que es "importante para la cinematografía española" no solo su nominación, que se produce por un personaje que ha hecho "en español", sino también "la nominación de la película". "Este año tomé la opción que es la correcta, creo, y que era estar en mi teatro, en mi tierra, haciendo teatro, que es lo que a mí me gusta", aseguró, aunque Sony "insistió" en que se desplazara en tres ocasiones a Los Ángeles para la promoción de la cinta de Almodóvar.