No por el tejado. La casa hay que empezarla por los cimientos . Para garantizar la supervivencia del sector de la construcción, que en Galicia da empleo a 76.000 trabajadores, de los que más de 26.700 son autónomos, y que representa el 9% del PIB, tiene una hoja de ruta con medidas económicas y sociales que permitirán " re-construir" una de tantas actividades golpeadas de lleno por las crisis del Covid-19. Planes de inversión tanto en obra pública como en privada para que la carga de trabajo llegue lo antes posible al tejido empresarial y promovido por las distintas administraciones de manera coordinada y con unos plazos definidos que generen certidumbre. Es el punto de partida, según expone la Federación Gallega de la Construcción, que permitirá levantar la casa reducida a escombros tras el estallido de la pandemia.

Para la patronal inmobiliaria gallega, resultan fundamental la implicación de la Xunta para reactivar el mercado residencial y garantizar que la vivienda sea un bien al que puedan acceder todos los estamentos de la sociedad. Y para ello, el sector inmobiliario reclama colaboración público-privada de pisos de protección oficial, así como mejoras fiscales que permitan reactivar el sector.

Federación Gallega de la Construcción. Dotar y potenciar la agilidad de la maquinaria administrativa, tanto en lo que se refiere a la obra pública como a la privada. Es lo que urge la patronal de la construcción porque „advierte„ de ello puede depender en gran medida el éxito y la supervivencia del sector. En obra pública, el presidente de la Federación Gallega de la Construcción, Diego Vázquez-Reino, apuesta por la creación de un mecanismo o protocolo específico para que durante un tiempo, tras el levantamiento del estado de alarma, se agilizasen las contrataciones con un procedimiento creado ad hoc que permitiese acortar los tiempos para llegar a la adjudicación de los contratos. Y en cuanto a la obra privada, reclaman la eliminación de trabas burocráticas que hacen que se ralentice una parte muy importante del sector que hace que la actividad esté a la espera de permisos, licencias y autorizaciones.

La recuperación de los fondos de formación es fundamental para la reactivación del mercado laboral una vez se supere la crisis derivada del Covid-19. "En un contexto como el actual , en el que algunos sectores por desgracia van a tardar más tiempo en recuperarse , nuestra sector está plenamente capacitado y preparado para absorber muchos de sus trabajadores mediante un proceso de formación y reciclado para su posterior introducción", defiende Vázquez Reino.

Para el sector es fundamental que las empresas no vean comprometida su viabilidad por tener que asumir retrasos en los pagos, de ahí su apuesta por la "agilización de los pagos a proveedores y contratistas".También resulta clave para la supervivencia del sector de la construcción la autorización de la utilización de los "ahorros" de las administraciones locales ya que permitiría la generación de una actividad económica "perfectamente distribuida en todos los territorios y llegaría a empresas de todo tamaño, y muy especialmente a pymes y autónomos, que representan el 90 % del tejido productivo".

Patronal inmobiliaria. Para la Federación Gallega de Empresas Inmobiliarias (Fegein), la colaboración publico-privada de viviendas de protección oficial „tanto en alquiler como en propiedad a precios asequibles„, tiene que ser el eje principal de la política de vivienda autonómica, seguido del de la rehabilitación. "De está fórmula de colaboración entre administraciones y sector privado inmobiliario, quitaremos carga de trabajo para las empresas y será fuente de creación de empleo", destaca el presidente de Fegein, Benito Iglesias. A su vez „añade„ se pondrá en el mercado vivienda acorde a los ingresos reales de las familias gallegas, tanto en arrendamiento como en propiedad.

Otra de las recetas que la patronal inmobiliaria gallega considera clave para capear mejor esta nueva crisis es el Build to rent. "Va a ser el modelo de negocio que transforme el mercado de la vivienda; se asentará definitivamente en España este 2020. El construir viviendas para alquilarlas ya no es una moda, sino una realidad y el presente en el sector inmobiliario gallego y nacional", sostiene Iglesias.

Pero el presidente de la patronal gallega no pasa por alto deberes pendientes de las distintas administraciones con el sector de la vivienda. Reclama licencias urbanísticas concedidas en un plazo máximo de dos meses por parte de las administraciones locales, bajada del IVA y del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales en cuatro puntos porcentuales. Para la patronal inmobiliaria faltan "normativas claras, concretas, agrupadas y legibles acompañado de una más que significativa reducción burocrática urbanística". Además, ve necesaria la aplicación inmediata de la legislación en caso de ocupaciones de viviendas y una ley de desalojo exprés que se aplique de forma inmediata "para erradicar un fenómeno que va a más en la comunidad gallega y que degrada barrios y áreas enteras con un elevadísimo coste económico y social".

En la lista de demandas también destaca el refuerzo del papel de Sepes y del ICO: para fomentar la construcción de nueva vivienda de alquiler social vivienda, para fomentar la construcción de nueva vivienda de alquiler social, así como la rehabilitación de viviendas existentes. Profundizando en la financiación derivada de fondos europeos, como el Banco Europeo de Inversiones (BEI). Y, urge Iglesias, también tomando medidas para la movilización del suelo público para la promoción de viviendas en régimen de alquiler social o asequible.