Al igual que ocurre con las provincias, la desescalada en quirófanos no irá al mismo ritmo en todos los hospitales sino que dependerá de la situación de la pandemia en cada uno de ellos. El Ministerio de Sanidad publica en su guía una escala con diferentes niveles de alerta -elaborada por la Asociación Española de Cirujanos y la European Association for Endoscopic Surgery- que puede servir como orientación a los centros para saber cuándo y qué tipo de cirugías programadas pueden ir realizándose. En la fase V y IV, donde más de la mitad de las camas están ocupadas por pacientes Covid, Sanidad aconseja como hasta ahora que solo realicen las cirugías urgentes. Quienes estén en la fase III que supone una alerta media -al tener entre el 25 y el 50% de las camas ocupadas y parte de los recursos de UCI también reservados a posibles casos a coronavirus- deberán priorizarse a pacientes oncológicos cuya supervivencia pueda complicarse en tres meses sin cirugía. En la fase II (menos del 25% de camas ocupadas y sin impacto en otros recursos) podrá operarse a cualquier paciente oncológico e incorporar a otros enfermos según la lista de espera y los valores médicos habituales para priorizar las cirugías. En la I (menos del 5% de camas) se volvería a la actividad normal.