Medio centenar de pacientes del área sanitaria coruñesa conviven con la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), estima Celia Pérez Sousa, coordinadora del equipo multidisciplinar de ELA del Chuac, quien explica que en esta enfermedad neurodegenerativa, "se van muriendo neuronas motoras de una manera progresiva, irreversible e incurable". "Esto provoca debilidad y pérdida de musculatura a los pacientes. En algunos casos, comienza en una mano, en una pierna, en las dos, en un brazo? y a veces también afecta a la lengua, a la faringe, con la imposibilidad de articular bien palabras o dificultad para tragar", indica.

Pérez Sousa se muestra cauta a la hora de hablar sobre la esperanza de vida de estos enfermos. "Hay pacientes en los que la progresión de la enfermedad es más lenta y llegan a una supervivencia de diez años, y otros no superan los tres", señala esta neuróloga, quien apunta que el mayor avance en el abordaje de esta dolencia ha sido, en los últimos años, "la creación de unidades de ELA multidisciplinares". "Si conseguimos un diagnóstico precoz y un seguimiento estrecho por los especialistas involucrados, y se va haciendo un soporte, se consigue que los afectados tengan una mejor calidad de vida", subraya.