Comunidades y Gobierno central acordaron a finales de agosto que la distancia oficial para el regreso a las aulas sería de 1,5 metros. Durante el verano, no obstante, Galicia operó con la previsión de un metro, lo que ha obligado, critican desde la CIG, a "reordenar y recalcular" medidas y espacios para constatar, denuncian, que "el profesorado y nuestras aulas son totalmente insuficientes". Además cuestionan que esa separación no se aplique en infantil y primaria o en las enseñanzas de idiomas y de régimen especial.

El sindicato lo apoya en datos que, explican, parten de una encuesta de urgencia realizada a 175 centros que imparten ESO, Bachillerato y FP. Ese estudio, señalan, deja una foto en la que tres de cada cuatro centros consultados (el 76%) deben hacer desdobles por no contar con espacio suficiente en las aulas. La CIG añade que el 68% de los encuestados dice disponer de espacio para desdobles dentro del propio centro, aunque eso conlleva "sacrificar" espacios como bibliotecas o laboratorios. El resto pide profesorado para aulas de tarde, para ESO y Bachillerato. Según la encuesta, el 77% de los centros consultados alegan que no podrán asumir los desdobles sin más docentes. La CIG se pregunta, vistas las cifras, "por qué" la Xunta desechó la posibilidad de establecer acuerdos en los concellos más afectados para usar sus espacios para clases. Su secretario, Suso Bermello, volvió a reprochárselo ayer a Educación.

Por otro lado, CIG-Admnistración anunció también que ha presentado una denuncia ante la Inspección "por la falta de evaluación de riesgos laborales de los centros de educación y la falta de medidas preventivas previstas para los puestos del personal no docente".