Paco Sanz, el hombre que simuló tener 2.000 tumores con el objetivo de recaudar dinero, ha aceptado una pena de dos años de cárcel al inicio del juicio que arrancó ayer en la Audiencia Provincial de Madrid, tras llegar a un acuerdo con la Fiscalía en el que reconoce haber estafado a miles de personas simulando una enfermedad terminal.

Al inicio del juicio, la defensa del valenciano Paco Sanz y la Fiscalía han negociado una conformidad y finalmente han llegado a un acuerdo en lo penal pero no en lo referido a la responsabilidad civil sobre cada uno de los afectados. La Fiscalía ha rebajado su petición de prisión para Sanz de seis años de cárcel a dos, y para la que era su novia en la época de la estafa de tres años a un año y nueve meses. Por tanto en el juicio se dirimirá únicamente la posible responsabilidad civil de los procesados, según acordaron ambas partes.

Paco Sanz está acusado de fingir en los medios de comunicación la gravedad de su enfermedad y estafar 264.780 euros a miles de personas, entre ellas varios famosos, a las que pidió dinero para curarse.

Junto a Sanz está acusada de estafa su expareja, Lucía Carmona, así como la madre del acusado, quien según la Fiscalía fue partícipe a título lucrativo junto con los anteriores. El padre, que también fue imputado por los mismos delitos que el resto, ya falleció.

Entre los afectados que están citados a testificar en esta causa se encuentran el humorista José Mota, el presentador de televisión Jorge Javier Vázquez, el exdirector general de Juventud de la Comunidad de Madrid y exjugador de waterpolo Pedro García Aguado, conocido por el programa televisivo Hermano mayor, los actores Santi Rodríguez, Nacho Guerreros y David Muro, y el chef Pedro Roca. Otros perjudicados son un oncólogo y un dermatólogo, e igualmente está citado para testificar el escritor Alejandro Ruiz Hurtado, autor del libro Así cayó Paco Sanz.

Han renunciado a las testificales los cantantes Melendi y Charo Reina, los presentadores de televisión Risto Mejide y Dani Mateo, el youtuber Auronplay y el futbolista del Cádiz Álvaro Negredo, sin perjuicio de las indemnizaciones y otros efectos de la sentencia que les pudiera corresponder, según explicaron ayer fuentes cercanas al proceso judicial en marcha.