Científicos españoles han participado en el hallazgo del enterramiento humano más antiguo conocido hasta la fecha en África, el de Mtoto, un niño enterrado hace 78.000 años en Kenia, según informó ayer el Museo de la Evolución Humana de Burgos. Este enterramiento es además la confirmación de que las poblaciones de la Edad de Piedra Media comenzaban a tener ritos funerarios.

“El niño, de unos 3 años, fue enterrado en una cavidad que había sido excavada específicamente para ello. Allí fue depositado en una posición intencionada y muy delicada, casi fetal, con la cabeza sobre un soporte, como si fuera una almohada. Su cuerpo fue envuelto en un tipo de sudario natural hecho con pieles de animales u hojas y, después, fue cubierto con tierra”, explica la directora del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana, María Martinón Torres.

Mtoto fue enterrado hace 78.000 años en el yacimiento keniano de Panga ya Saidi, que ha resultado ser un enclave fundamental para estudiar el origen de nuestra especie. Ayer, este hallazgo, coliderado por el equipo de Martinón, el Instituto Max Planck para el Estudio de la Historia Humana y los Museos Nacionales de Kenia, y en el que colaboraron investigadores de una treintena de instituciones de todo el mundo, ocupaba la portada de Nature.