La Guardia Civil disolvió en la madrugada del pasado viernes al sábado un macrobotellón de unas 300 personas en la playa de Razo, en Carballo, según informaron ayer fuentes del instituto armado.

Los hechos ocurrieron alrededor de la una de la madrugada, cuando la Guardia Civil de Carballo recibió llamadas de particulares alertando de la existencia de varios botellones en el arenal. Los agentes se desplazaron al lugar para disolver las aglomeraciones y realizaron diferentes denuncias por incumplimientos de las medidas sanitarias antiCOVID.

Hace unos días ocurrió algo similar con un macrobotellón en una playa de Corcubión.