Sanidad de Madrid abrirá un expediente por supuesta sustracción de material al médico acusado de maltratar a sus hijos

La Dirección General de Recursos Humanos y Relaciones Laborales de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid va a abrir “un expediente con designación de instructor” por la supuesta sustracción de material al médico del Hospital Gregorio Marañón que fue detenido junto a su mujer en la localidad de Colmenar Viejo por maltratar a sus ocho hijos, según han confirmado fuentes del departamento que dirige Enrique Ruiz Escudero a El Periódico de España —del mismo grupo editorial que LA OPINIÓN—. “Verificar la supuesta sustracción de material es lo que afectaría a la Administración”, indican desde la Consejería.

La detención de la pareja se produjo el 29 de marzo bajo la dirección del Juzgado de Instrucción número 1 de Colmenar Viejo, en el marco de una investigación del Equipo de Policía Judicial.

Los ocho hijos menores de edad del matrimonio eran “castigados físicamente y estaban malnutridos” y estaban confinados en una habitación. La pareja ha quedado en libertad bajo medidas cautelares. A los padres, un médico de 45 años y una mujer de 44, se les ha retirado cautelarmente la patria potestad de los menores, de los que tienen una orden de alejamiento y que han quedado ingresados en un centro de primera acogida de la región.

Uno de los datos que más han llamado la atención en este terrible suceso es que el padre era médico en un hospital madrileño. Tras las consultas a la Consejería de Sanidad sobre este caso y la situación laboral del padre de los menores, fuentes del departamento informan que “el Hospital Gregorio Marañón colaborará activamente ante cualquier requerimiento judicial”.

Asimismo, la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid va a abrir al facultativo un expediente con designación de instructor (una investigación interna) por la supuesta sustracción de material ya que, como se recordará, en la vivienda de la pareja se encontraron una gran cantidad de uniformes hospitalarios (batas, trajes de quirófano), material hospitalario (guantes, mascarillas, gasas, medicamentos), de los que en un primer momento no pudo acreditar su lícita procedencia por lo que se investiga al varón por un delito de hurto. La investigación de este caso se originó días antes, tras una denuncia de presuntos malos tratos contra una menor, iniciándose un estudio pormenorizado del entorno familiar. Las primeras pesquisas revelaron que los menores solían faltar constantemente a clase, siendo “justificadas las ausencias escolares por el padre que ejerce de médico en un hospital madrileño” y que también sometía a malos tratos a la madre de los menores, una española de 44 años, que a su vez “también ofrecía un trato degradante y descuido sobre sus ocho hijos”.

Tras obtener las pruebas oportunas, el titular del Juzgado, ordenó la inmediata la entrada y registro en el domicilio, que presentaba “un estado de insalubridad en todas las dependencias a excepción del despacho” del padre, mientras que la situación higiénico sanitaria de baños y cocina era “pésima”.