Darío y Tiago prueban en A Coruña el primer exoesqueleto para niños

Los pequeños, con una patología afín a la parálisis y atrofia muscular espinal, protagonizan la presentación en la ciudad de la primera tecnología pediátrica de ese tipo

Redacción

Darío tiene 7 años y sufre una patología afín a la parálisis cerebral. Tiago, de 9, padece atrofia muscular espinal (AME). Ambos fueron protagonistas, ayer, de la presentación en el centro Sinapse Neurología de A Coruña del primer exoesqueleto pediátrico del mundo, Atlas 2030, un ingenio electromecánico e inteligente que ha sido puesto en el mercado por Marsi Bionics, compañía reconocida como Empresa de Base Tecnológica (EBT), en cuyo accionariado participa el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Al encuentro acudieron fisioterapeutas y terapeutas ocupacionales de Aspace-A Coruña, GalicaAme y Amencer-Aspace para recibir formación y ver en funcionamiento el dispositivo.

Atlas 2030 está dirigido a niños de entre 3 y 14 años con atrofia muscular espinal, una enfermedad degenerativa que en España afecta a uno de cada 10.000 bebés, y también está diseñado para determinadas patologías relacionadas con la parálisis cerebral. El exoesqueleto pediátrico, de 12 kilos de peso y fabricado con aluminio y titanio, ayuda al paciente a caminar, en algunos casos por primera vez. Se adapta al cuerpo del niño para ponerle en situación de bipedestación y marcha. Tiene ocho articulaciones que imitan el funcionamiento del músculo natural y dos modos de funcionamiento: el pasivo donde las piernas se mueven automáticamente en función de una configuración a medida del niño, y el modo de intención de movimiento, que necesita que el niño haga una determinada fuerza —que el terapeuta selecciona— para que la tecnología avance.