El Materno de A Coruña atiende a unos 250 bebés prematuros cada año, el 15% de menos de 1.500 gramos

Por la Unidad de Neonatología del Servicio de Pediatría del Hospital Materno Infantil Teresa Herrera de A Coruña (Chuac), de máxima complejidad y referencia nacional para el abordaje de varias patologías, pasan cerca de 250 bebés prematuros cada año, el 15% nacidos antes de la semana 32 de gestación y de menos de 1.500 gramos. Grandes prematuros, por tanto, uno de los diagnósticos más complejos a los que han de hacer frente los profesionales del Chuac, donde vienen al mundo entre 40 y 50 pequeños, cada año, con esa condición. Casi uno a la semana. La mayoría sale adelante (en nuestro entorno, la supervivencia de esos niños, “con una calidad de vida buena o incluso normal”, es “muy alta”), no obstante, su estancia en el hospital puede llegar a prolongarse hasta más de dos meses, con el consiguiente impacto emocional, pero también económico y social, que supone para sus familias.

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Consciente de esta realidad, la Fundación María José Jove da un paso más en su alianza con la Fundación Profesor Novoa Santos y amplía el alcance de su Hogar de Corazones, servicio de alojamiento gratuito para familiares de pacientes de la Unidad de Cardiopatías Infantiles del Hospital Materno Infantil coruñés que tienen que desplazarse desde su lugar de residencia, en marcha en 2015 y financiado, en su totalidad, por la institución que preside Felipa Jove. Así pues, a partir de ahora, las familias con niños prematuros ingresados en la Unidad de Neonatología del centro de As Xubias podrán beneficiarse también de ese servicio mientras los menores estén hospitalizados.

“Pretendemos abrir un paréntesis en la vida de estas familias mientras dure la hospitalización de sus hijos —que, en el caso de los grandes prematuros, puede llegar a prolongarse más de dos meses—, fomentando vínculos durante la primera crianza desde el propio hospital”, explica el doctor José Luis Fernández Trisac, jefe de la Unidad de Neonatología del Materno, quien resalta que esta nueva alianza entre las fundaciones María José Jove y Profesor Novoa Santos “supone procurar un tratamiento integral a todas las familias que acuden a la Unidad de Neonatología”. “Y facilitar a los padres su presencia e integración como parte del proceso de atención y planificación de cuidados centrado en el menor, en caso de que el alojamiento familiar esté distante de nuestra Unidad”, destaca el doctor Fernández Trisac.

“Con el Hogar de Corazones buscamos darle prioridad a las familias que se encuentran en una situación de vulnerabilidad y minimizar el impacto económico y social de la hospitalización”, agrega Felipa Jove, presidenta de la Fundación María José Jove.

Para acceder al Hogar de Corazones, en estos casos, el procedimiento será similar al que se realiza desde la Unidad de Cardiopatías Infantiles: interconsulta de la Unidad de Neonatología al Servicio de Trabajo Social, para valorar, conjuntamente, la necesidad de la solicitud, y contacto con la Fundación María José Jove para tramitar el alojamiento de carácter gratuito. El recurso que se utiliza, mayoritariamente, en este programa son los Apartamentos Attica 21 de O Portazgo, dotados de todos los servicios, también cocina, lo cual facilita que las familias “no tengan que estar pagándose todos los días las comidas en la cafetería del hospital”.

Desde la puesta en marcha del Hogar de Corazones, financiado en su totalidad por la Fundación María José Jove, hace ocho años, se han beneficiado más de más 700 familias, más de medio centenar en 2022, con una estancia mínima de dos días, y máxima superior a un año.