Una inmigrante nigeriana acogida desde hace unos meses en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Ceuta ha denunciado el intento de extorsión por parte de un compatriota del campamento y de una mujer residente en Canarias, presuntos integrantes de una red ilegal.

Según lo destapado hoy por el diario "El Faro de Ceuta", que han confirmado fuentes policiales y judiciales, los dos acusados habrían estado coaccionando a esta mujer para que les entregara 40.000 euros, bajo amenazas de que, si no recibían el dinero, iban a matar a su familia, residente en Nigeria.

Tanto el subsahariano del CETI, que ya está identificado, como la mujer residente en Canarias (que formaría parte de una organización mafiosa) le habían exigido este dinero como pago de una deuda por haberle facilitado la entrada clandestina en la ciudad.

En caso de no pagar esos 40.000 euros, los extorsionadores pretendían que la joven se prostituyera, algo a lo que ella se negó, optando por contar su situación a personal del campamento para que la denunciaran ante la Guardia Civil, que ya ha abierto una investigación al respecto.

Esta joven tuvo que pagar nada más llegar a Ceuta una cantidad cercana a los 3.000 euros a las mafias, que ahora le exigen 40.000 euros con amenazas tanto para ella como para su familia.