Agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron ayer por la tarde al ex presidente del Real Madrid Lorenzo Sanz, en el marco de una investigación por el traslado de obras de arte fuera de España, según informaron fuentes policiales. Tras prestar declaración, Sanz abandonó a última hora de la tarde las dependencias policiales en la capital de España, en las que estuvo poco más de dos horas.

La detención corrió a cargo de la Brigada de Patrimonio del Cuerpo Nacional de Policía. El ex presidente del equipo madrileño quedó en libertad tras prestar declaración en dependencias de la Brigada de Investigación de Patrimonio Histórico, después de que fuera arrestado en su domicilio de la capita.

Lorenzo Sanz fue detenido por su presunta implicación en un intento de sacar obras de arte de España a Italia sin contar con la autorización pertinente, lo que supondría un delito contra el patrimonio.

A su salida, Sanz negó su implicación y dijo que le interrogaron sobre "unos cuadros que terceras personas sacaron del país para una subasta en Italia". El ex presidente del Real Madrid, ya en libertad y acompañado por su abogado, se defendió: "No tengo nada que ver con todo esto", aseguró Sanz, quien precisó que, hace tres años, personas de la casa de subastas más importante del país italiano le pidieron unos cuadros.

Sanz detalló que los intermediarios italianos se llevaron algún cuadro suyo, de origen español, y se comprometieron a encargarse de todos los permisos necesarios para sacar las obras de arte del país, pero no los tramitaron. Sanz sostiene que sus cuadros "no tienen prácticamente valor" y que hasta ayer no volvió a saber nada ni de los cuadros ni de lo que se pagó por ellos en subasta. "Yo no he sacado ninguna obra de arte", recalcó el ex presidente del Real Madrid antes de agregar: "No entiendo de arte porque mi negocio es el inmobiliario".

Según la legislación, cualquier obra de arte con más de cien años de antigüedad requiere un permiso de salida del país, apuntó Sanz.

Segundo arresto

Lorenzo Sanz ya fue detenido el 26 de septiembre de 2008 en Córdoba a raíz de una denuncia interpuesta por una entidad bancaria, que le responsabilizaba de un supuesto delito de estafa. El arresto del ex dirigente madridista se produjo cuando, supuestamente, intentaba cobrar unos pagarés falsos por una importante cantidad de dinero.

Por esta otra causa, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, Fernando Andreu, citó a Sanz a declarar el 3 de diciembre de 2008 como imputado por presuntos delitos de estafa y falsedad en documento mercantil por la supuesta entrega de un cheque sin fondos por valor de 2,4 millones de euros. No obstante, ese mismo día fue retirada la querella presentada contra él por este asunto.

La Audiencia Nacional investigaba al empresario y otros colaboradores suyos por la presunta entrega del cheque a un agente inmobiliario durante el proceso de compra-venta de un inmueble de su propiedad realizada en la ciudad francesa de Cannes que no se llegó a materializar.

El querellante era el agente inmobiliario italiano Desiderio Rosato, que intermedió entre la sociedad de Sanz SARL Paradiso y la mercantil Restauraciones Inmobiliarias Roma para la venta de un edificio situado en Cannes propiedad del empresario español, según las mismas fuentes.

Ambas sociedades firmaron un contrato de compra-venta que incluía una señal inicial de 1,2 millones de euros, que fue abonada por Restauraciones Inmobiliarias Roma. La sociedad de Sanz retiró su oferta poco después y el comprador le exigió la devolución del cheque más otros 1,2 millones de euros en concepto de indemnización.

SARL Paradiso presentó el justificante de una transferencia por valor de 2,4 millones de euros, realizada a través del Club Deportivo Mérida, destinada a Restauraciones Inmobiliarias Roma que, según acusa Rosato, resultó ser falso y carecía de fondos. Sin embargo, la misma mañana en la que Sanz estaba citado a declarar, el agente inmobiliario retiró la querella presentada contra él.