El trágico accidente deja huérfano de madre a un niño de 22 meses, fruto de la relación de la fallecida y Gonzalo Brea, que convivían con la madre de éste en Bueu desde hace seis años. "Aínda non o podemos crer", decían ayer los vecinos. "Ela era unha rapaza moi agradable, moi sociable". Con el dolor de la desgracia todavía presente, se aferraban a la esperanza de que Gonzalo Brea pudiese superar sus lesiones. Éste no es el primer accidente de tráfico que sufre el joven de Bueu. El 13 de septiembre de 2009 resultó herido grave después de que el vehículo que ocupaba junto a otros tres amigos, de 15, 19 y 24 años, se saliese de la vía por causas desconocidas en la parroquia de Cela, muy cerca de su casa, y se precipitase por un terraplén.