Los dos agentes de la Guardia Civil de la comarca de O Salnés detenidos por sus propios compañeros el pasado lunes en una operación antidroga quedaron el libertad provisional con cargos ayer tras prestar declaración ante la jueza del Juzgado de Instrucción 3 de O Porriño. Como medida cautelar, ambos tienen la obligación de comparecer cada 15 días en dependencias judiciales o cuando sean llamados por dicho juzgado.

Se les imputan los delitos de tráfico de drogas, revelación de secretos, omisión del deber de perseguir delitos y tráfico de influencias, según el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia. Todo, presuntamente, para favorecer la red de tráfico de drogas liderada supuestamente por el arousano Fernando Fariña Betanzos, alias O Fuchico. Las diligencias del caso siguen siendo secretas. La detención del agente cambadés E.G.V., de unos 35 años, y el grovense J.L.N.C, un par de años mayor que su compañero, se produjo el pasado lunes en el transcurso de la segunda fase policial de la denominada operación Salamina, cuya investigación está siendo desarrollada por el Equipo Contra la Delincuencia Organizada de la Guardia Civil.

A los guardias civiles destinados en los puestos de Cambados y O Grove se les atribuyeron en el momento de su detención los delitos de revelación de secretos y omisión del deber de perseguir delitos para favorecer la supuesta red de narcotráfico coordinada por el cambadés O Fuchico. Tras la declaración ante la juez de O Porriño, que lleva el caso desde el inicio de la investigación, se les añadió a ambos agentes los presuntos delitos de tráfico de drogas e influencias. En las dependencias judiciales se presentaron familiares y allegados de los dos agentes detenidos, que entraron en un coche policial, con el rostro cubierto, hasta el aparcamiento judicial.

La operación Salamina ha supuesto desde diciembre la detención de una veintena de sospechosos de participar en una red que, presuntamente, distribuía estupefacientes a lo largo de toda la comunidad gallega, contando con miembros asentados en al menos tres municipios: Salceda de Caselas, Bueu y Cambados. En el transcurso del operativo, que culminó con la detención de los dos guardias civiles imputados, se realizaron cuatro registros en los domicilios particulares de los agentes y en los pisos que estos ocupan en sus respectivas casas cuartel.

El presunto líder de la trama, Fernando Fariña, se entregó el pasado mes de diciembre voluntariamente a los pocos días de que los agentes de las fuerzas del orden público tratasen de detenerlo y lograse huir en un potente BMW que incluso llegó a chocar contra uno de los vehículos policiales en su fuga.

De los nueve detenidos iniciales en el principio de esta operación permanecen en prisión provisional, además de O Fuchico, el vecino de Bueu J.R.O. (que transportaba una importante cantidad de droga cuando fue arrestado); el cambadés encargado supuestamente de traer la droga desde Madrid a Galicia, M.S.J.; y el vecino de Salceda J.P.P., acusado de acompañar a O Fuchico en sus viajes. En total el número de implicados se eleva a veinte.