Un hombre de 38 años mató a su esposa, de idéntica edad, en la pedanía de Burjulú de Cuevas del Almanzora (Almería) y, tras avisar de lo que había hecho a una amiga con un mensaje de WhatsApp, se suicidó. El crimen fue en la vivienda en la que la mujer cuidaba a una anciana de unos 80 años impedida. La pareja tenía una niña de 8 años que no se encontraba en la casa porque estaba en otro municipio con familiares del hombre. Al parecer, la víctima había roto la relación con su pareja, que quería retomarla. El agresor, boliviano, se ahorcó, y por el momento no trascendió cómo murió la mujer, natural de Paraguay.