La Policía Nacional cree que el autodenominado rey del cachopo, César Román, detenido y encarcelado por matar a su pareja, Heidi Paz, de 25 años, acabó con la vida de su novia de forma accidental en el piso donde ambos vivían, en Vallecas.

Los investigadores sospechan que en una discusión pudo golpearla o empujarla y provocar su muerte de forma fortuita. También creen, siguiendo con ese hilo de las pesquisas, que el hombre se asustó y que luego descuartizó el cadáver, para lo que desplegó un plástico grande para no dejar manchas de sangre en el suelo.

Luego enterró parte del cuerpo y el cuchillo cerca de su domicilio. El torso, al ser más pesado, lo metió en una maleta y lo condujo hasta la nave de la calle Sebastián Gómez, en el distrito de Usera. César Román mantiene que él no mató a la joven que era su pareja.