La cocaína que cruza el Atlántico desde Sudamérica a España para su distribución en toda Europa crece de forma imparable. Hace diez días fue apresado el Apollo I, un pesquero sin bandera que zarpó de Brasil con 1.500 kilos de cocaína. La droga debía trasvasarse a otro buque encargado de acercarla a Galicia, pero una operación de la Policía Nacional frustró el negocio.
La Policía Nacional también decomisó en enero doce contenedores en Marín con sustancias para elaborar 3.000 kilos de cocaína que abastecían al mayor laboratorio de Europa, ubicado en Valencia, y 350 kilos de cocaína que llegaron entre fruta a Leixoes para un grupo ourensano. En febrero, 3.300 kilos de cocaína vinculados a narcos gallegos fueron intervenidos en el carguero Sea Scan, a 150 millas de la costa portuguesa.
