Limpiar las ventanas de casa es una de las tareas domésticas más pesadas que hay. Quitar el polvo, las manchas de las manos o las marcas del agua cuando ha llovido y dejar los cristales relucientes no es fácil. A continuación te contamos varios remedios caseros que las abuelas ya usaban para ser la envidia del vecindario sin apenas esfuerzo:
Alcohol con agua
Mezcla un chorro de alcohol con un poco de agua. Con una esponja frota el cristal y después limpia con un trozo de periódico. ¡En pocos minutos tus ventanas relucirán!
Cristales limpios con cebolla
Corta una cebolla por la mitad y frota. Déjala actuar y después retira con un poco de papel la suciedad. ¡Los resultados te sorprenderán!
Con un borrador de pizarra
En un cubo vierte agua caliente y amoniaco. Frota con un paño los cristales y después pasa por encima un borrador de pizarra.