Los reyes Felipe y Letizia han vuelto a coincidir en sus agendas oficiales para reunirse en el Palacio Real con el Patronato de la Fundación Princesa de Girona, volviendo así a cumplir con sus compromisos después de felicitar las navidades a todos los españoles con una imagen de lo más distendida e informal en Covadonga. Con un estilo muy diferente con el que paseaba por su Asturias natal, la Reina optó ayer por un look de corte lady, como se conoce al estilo vintage de los años 50, que se ha convertido en su favorito de las últimas semanas después de brillar con un vestido abrigo del mismo corte durante la semana pasada en su visita al Museo Reina Sofía.

Letizia apostó por un look sobrio con un vestido evasée en gris, estampando a cuadros, y largo midi de manga corta. Un diseño anudado a la cintura y firmado por Massimo Dutti. Y lo ha combinado con unos salones azules de Magrit con la cartera a juego y unos pendientes de aro.

La Fundación Princesa de Girona (FPdGi) conmemorará su décimo aniversario con un acto en Barcelona a finales de noviembre de 2019, presidido por los Reyes, que incluirá la ceremonia de entrega de los premios, que hasta ahora se había celebrado en la capital gerundense o en la provincia. El presidente de la FPdGi, Francisco Belil, informó de esta decisión en la reunión de ayer. El punto principal del encuentro, al que asistieron más de 60 patronos, de los cerca de 90 que integran el órgano de gobierno, era informar del plan de actividades por el X aniversario con el que la fundación pretende "un relanzamiento del proyecto en general y de los premios".

El evento central será a finales de noviembre en Barcelona, con una serie de actos repartidos en dos jornadas presididos por los reyes.

Entre ellos, destacan la ceremonia de los Premios FPdGi 2019, el encuentro de Rescatadores de talento y un acto con los premiados de estos diez años.

La fundación asegura ser "consciente de la singularidad que supone este aniversario" y aboga por celebrar el evento de "carácter extraordinario" en Barcelona para "poner en valor todo el contenido que la entidad ha desarrollado a lo largo de esta década" en favor de los jóvenes.

La gala de entrega se celebró este año por primera vez fuera de la ciudad de Girona después de que el Ayuntamiento, gobernando por el PDeCAT, denegara el uso del Auditorio con el argumento de que iba a estar en obras en esas fechas.

En su lugar, la ceremonia se trasladó al centro de eventos del Celler de Can Roca, en la localidad de Vilablareix, mientras que las jornadas de actividades con los distinguidos fueron en un hotel del municipio de Caldes de Malavella.

El discurso extraordinario de Felipe VI del 3 de octubre del pasado año, en el que denunció la "deslealtad inadmisible" de los independentistas, provocó reacciones de malestar en algunos ámbitos, entre ellos, por parte de la alcaldesa de Girona, Marta Madrenas. El consistorio gerundense, que no tiene representación en la Fundación, anunció que se ausentaría en los actos en los que participase la Casa Real y declaró a Felipe VI persona "non grata" en la ciudad. La Cámara de Comercio de Girona decidió abandonar el patronato.