La reina Letizia alertó ayer del problema de salud mental que sufren los jóvenes y trasladó su compromiso para defender este área sanitaria en la infancia y la adolescencia y reforzar programas de salud mental en todo el mundo. Así lo aseguró durante su discurso en una reunión organizada por Unicef, Unesco y OMS, en la Semana de la Asamblea General de las Naciones Unidas y la Cumbre de Transformación de la Educación promovida por el secretario general, António Guterres.

Explicó que las cifras de jóvenes que sufren y padecen malestar emocional son “escalofriantes y desgarradoras”. “Cada 24 horas, 126 niños y adolescentes se quitan la vida en el mundo”, cifró. En este punto, recordó que Unicef es un “actor clave” porque “alza la voz” e impulsa “políticas activas, recopila datos para trazar estrategias, propone y crea espacios de debate donde todos aportan posibles soluciones para una realidad inapelable: el malestar psíquico de nuestros niños ha empeorado”, apuntó.

Así, Letizia puso de manifiesto que la pandemia ha evidenciado aún más un problema que venía de antes y reconoció que aún existen estigmas que rodean a la falta de salud mental y la incomprensión, o incluso el rechazo, que provocan. La reina reivindicó que el Sistema Nacional de Salud, con la participación de entidades como Unicef, implementó la Estrategia de Salud Mental para los próximos cuatro años. “Tiene como objetivos favorecer la recuperación y la inclusión social, desde la perspectiva de los derechos humanos, el apoyo a las familias y la promoción de un modelo integral y comunitario que favorezca la recuperación y la inclusión social”, indicó. Por último, Letizia garantizó su compromiso y trabajo para impulsar la acción prioritaria y el refuerzo de los programas de salud mental en todo el mundo.