Mantener en buen estado el lavavajillas y alargar así su vida útil no es una tarea complicada. Basta con ser rigurosos con algunas pautas que a menudo descuidamos para garantizar su funcionamiento óptimo y alargar sus años de vida. Sin embargo, que los tiempos han cambiado: aquellos viejos lavavajillas que duraban tres décadas ya no existen y los de nueva generación raramente superarán, con mucha suerte, los 12 o 13 años (dependiendo de la marca y de la frecuencia de uso). 

Además de limpiarlo con regularidad y mantener unos correctos niveles de sal y abrillantador, es importante no meter trozos de comida en el lavavajillas que puedan quedarse atascados. Ante cualquier sonido extraño o anomalía que detectemos, es conveniente parar el lavado cuanto antes y asegurarnos de que todo funciona correctamente. Estos son solo algunos aspectos a tener en cuenta para cuidar nuestro lavavajillas como se merece, pero hay muchos más.