El Ayuntamiento inauguró una zona del parque infantil de O Ventorrillo sin que los juegos estuviesen seguros, lo que provocó que se lesionase una de las niñas que se divertía en el área recién estrenada. La pequeña cayó cuando se tiraba de la tirolina porque cedió una de las piezas del juego.

Los residentes en el barrio exigen al Ayuntamiento que termine los trabajos de la otra zona del parque, que lleva seis meses en obras, que arregle la tirolina y que compruebe que los juegos están en condiciones para ser utilizados. Los vecinos denuncian la "inseguridad" del área habilitada para los más pequeños, situada enfrente de la escuela infantil de O Ventorrillo.

El suelo de goma de la parte del parque que se estrenó el miércoles de la semana pasada ya está levantado en algunas zonas y es excesivamente blando. La tirolina, además de estar rota, tiene algunas pintadas, y el panel informativo que instaló el Ayuntamiento en el que se pueden leer algunas normas para usar el área está oculto tras un grafiti de color negro. En el centro del parque, entre la tirolina y el tobogán, hay un árbol contra el que pueden chocar los niños que corran de un lado a otro.

Los vecinos de O Ventorrillo reclaman al Gobierno municipal que adecúe la zona, que es para niños de entre seis y doce años, a las necesidades de los pequeños y que compruebe que los juegos están preparados para ser utilizados antes de inaugurarlos. En el área del parque que aún está en obras queda por instalar el suelo de caucho sintético y parte del cierre de madera. Los alrededores de los árboles que hay en esta parte del parque infantil están encharcados y en las inmediaciones hay acumulada basura. Aunque la zona en la que se realizan los trabajos está vallada algunos niños se cuelan en ella y utilizan los juegos, que ya están instalados. Los residentes en O Ventorrillo aseguran que las obras van "lentas" y exigen al Ayuntamiento que las termine cuanto antes.