Fomento no garantiza la ampliación de la pista de Alvedro

La advertencia introductoria a una pregunta formulada por la diputada popular en el Congreso, Belén do Campo, desliza matices a la ejecución final de los trabajos, por mucho que los presupuestos generales correspondientes a 2010 recién presentados por el Gobierno reserven una partida de 180.000 euros para este cometido. Pero la respuesta gubernamental a los populares continúa: "Una vez finalizados los estudios correspondientes se adoptará la decisión de ampliar o no la pista, teniendo en cuenta no sólo criterios técnicos y operativos sino también sus repercusiones sociales y ambientales".

Si de cuestiones sociales se trata, Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) ya advirtió en el momento de presentar los tres mil folios del estudio de impacto ambiental del "importante impacto social" que implicaría la ampliación de la cabecera de la pista. Para llevarla a cabo sería obligatorio expropiar 46 viviendas, dos empresas y una escuela infantil, una parte de los 200.000 metros cuadrados necesarios para la obra repartidos entre las 250 parcelas que actualmente rodean el perímetro del aeropuerto en el municipio vecino de Culleredo y que el Gobierno tendría que adquirir de poner en marcha los trabajos.

Los presupuestos generales para el año que viene, precisamente, reflejan una partida específica para las expropiaciones de terrenos. Si bien la cuantía estipulada para el año que viene se limita a 226.000 euros, el montante previsto para 2011 supera los 29 millones de euros (29.478.000). ¿Para qué se guardan en cartera tales cantidades? Pues, entre otros motivos, para comprar la superficie que permita prolongar la pista 400 metros por la cabecera más cercana a la ría.

Y si de repercusiones sociales se trata, como recoge la respuesta a la pregunta parlamentaria de Belén do Campo, no hay que olvidar que el plan de ampliación presentado en abril por Aena supone el de mayor impacto para la población de Culleredo por la cantidad de viviendas que obliga a derribar. Son estas cuestiones las que encendieron la oposición por parte de los dirigentes de la comarca, en especial de los alcaldes de Culleredo y Oleiros, Julio Sacristán y Ángel García Seoane, respectivamente.

Al segundo, más que el hecho de que alguno de sus vecinos se viera forzado al desalojo, le amarga que la obra mutile el planeamiento urbanístico de su municipio. De hecho, una parte importante del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) aprobado por la Xunta el pasado mes de marzo se encuentra suspendido al verse afectado por la huella sonora del aeropuerto. La oposición a la prolongación de la pista fue tal que el Ayuntamiento de Oleiros promovió entre los vecinos la presentación de alegaciones.

Éstas representan una parte de las 14.000 que se enviaron a Aena para oponerse al proyecto, el mismo al que el Gobierno, por medio de los presupuestos generales del Estado, pone fecha de finalización para el año 2015. Hasta el próximo mes de noviembre, de ahí las cautelas que manifiesta el Gobierno a las preguntas parlamentarias sobre la ejecución del proyecto, Aena tiene margen para contestar a las quejas y enviar un informe al Ejecutivo. Es por ello que la respuesta a la diputada perteneciente al grupo popular no es del todo explícita al respecto y mantiene las dos posibilidades. De esta forma quedan sobre la mesa tanto el desarrollo de las obras como su rechazo, por mucho que el año que viene haya presupuestados 180.000 euros en exclusiva para las obras de ampliación y 1.945.000 en el ejercicio de 2013.

La preocupación gubernamental contrasta sin embargo con la rotundidad expresada por el ministro de Fomento, José Blanco, cuando se le cuestionó sobre las garantías de ejecución de las obras. Blanco aseguró la semana pasada que ninguno de los aeropuertos de la comunidad "verá mermada su capacidad", en relación al deseo de la Xunta de gestionar de manera conjunta los tres aeródromos gallegos: Alvedro, Lavacolla y Peinador. Hace unas semanas, el ministro también se refirió a la ampliación en unos términos que no dejaban demasiadas dudas, lo que suscitó la celebración unánime por parte del Consistorio.

Esto en lo que se refiere a la posibilidad de que la pista de Alvedro finalmente se alargue 400 metros, porque el proyecto de ley de los presupuestos presentados el martes por el Ministerio de Economía incluye numerosas partidas para el aeropuerto local. La mejora del campo de vuelo, por ejemplo, contará el año que viene con más de un millón de euros procedentes del Gobierno (1.381.000). La "ampliación de la plataforma sur", otro ejemplo, supondrá 659.000 euros adicionales, de acuerdo a las cifras publicadas por el Gobierno. Las citadas expropiaciones de terrenos, unidas a las innovaciones que está previsto introducir en los sistemas de navegación aérea elevan todavía más la inversión estatal prevista para el 2010 en el aeropuerto de Alvedro.

Estas cifras, no obstante, no superan a las reservadas para las obras en los aparcamientos y los viales, calculadas en 21.494.000 euros para 2010. Estos trabajos representan ya desde los presupuestos de 2009 una de las actuaciones de mayor envergadura en el aeródromo , que actualmente se encuentran en obras. Las actuaciones en materia de seguridad comprometen además 147.000 euros.

Las mejoras en Alvedro, culminadas en caso de que la ampliación de la pista se concrete, incluyen la remodelación de la terminal de pasajeros. Por el momento, esta partida está reservada a la redacción del proyecto de ejecución y no implica inversiones para el año que viene. Los fondos llegarán en 2011, en forma de 617.000 euros.

En lo que se refiere a la financiación del aeropuerto, el Gobierno también respondió a una pregunta formulada por la diputada socialista y concejal de Hacienda en el Ayuntamiento, Carmen Marón, quien solicitó en detalle algunas de las inversiones efectuadas por Aena en Alvedro en el periodo comprendido entre 1996 y 2004. Aeropuertos respondió que, entre otras actuaciones, se reformó el edificio de la terminal por un importe de 560.000 euros, una obra que se finalizó en julio de 1996. El edificio de pasajeros necesita ahora nuevas reparaciones, visto que se prepara un proyecto de mejoras. La misma remodelación necesitó en 1998 la torre de control y la primera planta del bloque técnico, obras que ascendieron a 510.000 euros. Además, en la relación de respuestas a la pregunta de Marón, figuran los trabajos en el edificio de cocheras, el hangar del helicóptero y la plataforma de estacionamiento de aeronaves.

Tal esfuerzo inversor efectuado por parte de Aena durante los últimos años se recoge en otra pregunta, en este caso formulada por otro diputado del Partido Popular, Antonio Erias. El Gobierno comienza excusando el descenso en el número de pasajeros que acumula Alvedro, argumenta que el crecimiento de los últimos años se ha visto interrumpido por la crisis económica, pero asegura que mantendrá las actuaciones inversoras.