La familia de Isabel Herrera, la turista salmantina que falleció hace justo un mes en el paseo marítimo al desprenderse la barandilla sobre la que se había apoyado y precipitarse desde una altura de cinco metros, acudirá a los tribunales por la vía penal. Su intención es dirigir la querella contra el concejal de Infraestructuras, Esteban Lareo, aunque puede que se amplíe a otros representantes del Ejecutivo municipal con responsabilidad en el mantenimiento de la valla. El viudo de la víctima, Evaristo Sánchez, ha tomado esta decisión después de recibir el informe de la Policía Científica en el que se determina que el trágico accidente se debió al "mal estado" de los tornillos que sujetaban la balaustrada al suelo.

"Las bases de las barandillas no se encuentran rotas ni dobladas, por lo que el accidente se produjo exclusivamente como consecuencia del mal estado de conservación de los tornillos", concluye el informe policial remitido al Juzgado de Instrucción número 2, responsable de investigar la muerte de Isabel Herrera el pasado 21 de marzo en el paseo marítimo. Los agentes detallaron que existe un riesgo importante de caída en la balaustrada, tras comprobar que existían tornillos oxidados y desperfectos en la estructura que sirve de anclaje. Con estos datos sobre la mesa, el viudo cree que ha quedado en evidencia que es el Ayuntamiento y, en este caso, el concejal de Infraestructuras, el responsable de la tragedia.

El abogado que representa los intereses de la familia asegura que, además de Lareo, no se descarta llevar por la vía penal a otros integrantes del departamento de Infraestructuras, como responsables directos del mantenimiento y conservación de la balaustrada, "cuanto menos por una imprudencia". "La barandilla no estaba forzada ni doblada. Queremos saber quién es el responsable de verdad", añade Evaristo Sánchez.

A los tres días del accidente mortal, el edil de Infraestructuras defendió que era imposible tener todas las barandillas de la ciudad en perfecto estado: "El Ayuntamiento cumple con sus tareas y obligaciones. Lo hacemos las 24 horas de cada uno de los 365 días del año, pero la perfección no existe". Estas declaraciones sentaron muy mal al marido de Isabel Herrera, quien aseguró a este periódico hace cuatro semanas que Esteban Lareo tenía que dimitir: "Como mínimo, si puedo conseguir que el señor Esteban Lareo tenga que dimitir e irse de ahí lo voy a intentar por todos los medios. Este señor no tiene ni que hacer esas declaraciones, ni siquiera me ha llamado para darme el pésame". El concejal socialista también atribuyó "competencias" en el mantenimiento del paseo marítimo a la responsable municipal de Medio Ambiente, que dirige su compañera, también socialista, Nieves Vázquez.

El alcalde, Javier Losada, tardó una semana -y porque el propio viudo decidió ponerse en contacto con él- en expresar sus condolencias a la familia: "Dice que está muy consternado, que lamenta mucho el accidente, que no se puso en contacto conmigo por respeto al dolor que yo tenía, pero como mínimo le dije que me diera el pésame", lamentó Evaristo Sánchez después de hablar por teléfono con el regidor, quien llegó a admitir que existían desperfectos: "Parece ser que había algunos puntos de óxido, pero creo que hay que esperar al informe de la Policía Científica y en ese momento tendremos una causa". El informe policial ratifica esta tesis inicial y pone en evidencia el "mal estado" de la valla.

El abogado de la familia de Isabel Herrera destaca que las declaraciones de los vecinos del barrio, que aseguraron que habían denunciado el deterioro de las estructuras del paseo marítimo, se suman al informe de la Policía Científica para confirmar su teoría de que se produjo una "omisión" de responsabilidad en este caso. El 092 ya había constatado en febrero del año pasado el peligro que suponía para los viandantes los desperfectos de la valla del paseo marítimo. Según fuentes municipales, el expediente de la Policía Local se remitió al servicio de Talleres, que se encargó de reparar la barandilla desde la que se cayó la turista salmantina.

El alcalde se negó a poner en marcha una comisión para, a nivel interno, tratar de esclarecer las causas del accidente y por qué falló la barandilla, pese a las solicitudes realizadas por la oposición y por asociaciones vecinales. Javier Losada se escudó en que era el Juzgado de Instrucción número 2 de A Coruña el encargado de investigar los hechos.

La barandilla del paseo marítimo donde perdió la vida Isabel Herrera continúa sin repararse un mes después de que se produjese el accidente. El Ayuntamiento afirmó en las últimas semanas que estaban a la espera de tener el visto bueno del juzgado para poder subsanar los desperfectos de la balaustrada, que continúa acordonada con cinta policial y vallas de obra.

Los peatones pueden pasar sin problemas junto a la barandilla que se ubica en el paseo marítimo, a la altura del cruce con la calle Veramar. El accidente sucedió el 21 de marzo, cuando Isabel Herrera y su marido, Evaristo Sánchez, y unos amigos aparcaron sus dos caravanas en el paseo marítimo. Cuando se disponían a cruzar al otro lado para ver el mar, uno de los amigos de la fallecida les pidió que parasen porque desconfiaba de un joven que acaban de cruzarse. Isabel Herrera se apoyó sobre la balaustrada, que se desprendió por el mal estado en el que se encontraban los tornillos anclados al suelo, según el informe policial. " Mi mujer se apoyó en la barandilla y, cuando íbamos a apoyarnos nosotros, cedió", lamentó Evaristo Sánchez.